Buena urraca del machito a la segunda

Hoy los halcones estaban más gordos que nunca, sobre todo el macho que pesaba 616 gramos, la hembra estaba en 780.
Hemos salido con Javier nuestro sobrino, Rodrigo (el hijo de mi hermano) y un amigo suyo y con Chencho nuestro hermano y tres de sus hijos.
Hemos hecho un primer lance, en el que hemos soltado a los pájaros muy cerca de la urraca, pero no se han ido a por ella si no por otra que no hemos visto dónde encerraban y después de un rato buscando hemos llamado al señuelo, porque no la encontrábamos.
El segundo lance ha sido en una zona de vaguaditas, que a mi no me convence demasiado.
Pero después de soltar a unas urracas, que no hemos visto dónde se encerraban al final hemos visto que encerraban a un par de ellas en una zarza.
Hemos ido para allá y las hemos sacado y las han atacado bien pero nada han vuelto a la zarza.
A la segunda vez que las hemos sacados una se ha ido arrastrada por el viento (que hacía mucho) y otra se ha quedado encerrada en el mismo sitio.
La hembra se ha ido detrás de la que se ha ido, y el macho se ha vuelto a colocar bien.
La hemos sacado pico a viento y la urraca ha salido y cuando justo iba a dejarse llevar por el viento dándo la vuelta el macho (muy bien) la ha trabado desde arriba.
Hemos intentado seguir con la hembra, que no había visto la captura, pero al final si que lo ha visto y ha bajado con el macho.
Así que nada hemos cebado un poco (tampoco demasiado, media urraca para cada uno) y a casa.
La única pega que al macho se le han terminado de caer los dos implantes de las dos plumas centrales de la cola. Está pidiendo a gritos que lo metamos ya en la muda.
Por cierto, la hembra nos hemos fijado y ya tiene dos plumas mudadas en la espalda.