Hoy Borja no ha venido y me he llevado como morralero a mi
cuñado Míguel que se ha traído a Alfonso, un colega del trabajo, que venía con su
hija Julia.
Estaba la tarde encapotada pero al salir se ha despejado quedándose
un día muy bueno.
Los pájaros estaban bien de peso gracias al buen hacer de mi
hermano, ayer, dándoles lo justo para premiar y que repitieran peso hoy.
728 grms la hembra y 526 grms el macho.
Después de un rato hemos localizado a una urraca en un buen
sitio, había higueras y almendros pero separados suficientemente como para
intentar un lance.
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| Con Alfonso y Julia cebando a los halcones |
He lanzado al machito que ha encerrado a la urraca en una
higuera y después hemos lanzado a la hembra que la llevaba Míguel. Los pájaros
han trabajado muy bien estando colocados en todo momento, hemos rodeado la
higuera para sacar a la urraca hacia lo limpio y la hemos sacado pero ha
conseguido llegar, por los pelos y con un buen quiebro, a una hilera de
almendros y de ahí se ha movido de uno a otro pero la hemos cortado el paso y
la hemos llevado al último para sacarla hacia un sembrado, ha habido varios
ataques y al final cuando la urraca ha intentado volver a la primera higuera el
ataque combinado de los halcones le han hecho tirarse al suelo llegando Pluma
con toda su fuerza para llevársela puesta; el machito, muy atento, ha bajado enseguida
al señuelo.
Bonito lance con varias “sacadas” y sus correspondientes
ataques donde los halcones lo han hecho muy bien estando centrados y muy pendientes
en todo momento.
Les he cebado hasta la saciedad con la urraca, dos pollitos
y algo de paloma para premiar su buen trabajo y sabiendo que mañana lunes no
volaremos. Nos gusta hacer de vez en cuando grandes buches cuando lo hacen muy
bien para reforzar su querencia a las difíciles urracas.
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