jueves, 8 de diciembre de 2011

Cazamos gracias a un buen golpe de suerte

Hoy hemos salido con nuestros sobrinos Javier y Álvaro y también con Riki y sus hijos.
Los pájaros estaban bien de peso:
Torchu 539
Y pluma 738
Pensábamos que al ir en otro coche las urracas aguantarían algo más pero aún así, en el primer sitio, dónde la crianza, no hemos conseguido ver buen lance.
Nos hemos ido hacia otra zona, cerca de un picadero y hemos visto dos urracas en lo alto de árbol grande pero muy cerca de una valla.
Así que hemos dejado a Javier y Álvaro a pie en la valla y nosotros nos hemos parado a la altura del árbol con el coche a unos 40 metros, al acercarse nuestros sobris la urracas han salido primero una y luego otra bastante altas (a unos 30 metros) y como queríamos han pasado por encima del coche, en ese momento hemos soltado a los pájaro que han salido a por ellas.
Cada urraca ha girado en una dirección distinta y cada halcón detras, pero como estaban altas se han encerrado muy lejos a una la hemos visto encerrarse en una hilera de árboles a unos 300 metros nuestros y a la otra en dirección contraria.
Hemos dudado a por cual ir y al final nos hemos decantado por una de las dos (no sin una buena discusión antes... ) hemos ido con el coche para ir más rápido y a unos 300 metros hemos parado sin ver a la urraca por ningún lado.
Había un espino grande y hemos tirado una piedra por si estuviera allí la urraca, cuando pasaban los pájaros, pero nada.
Estábamos ya sacando los señuelos para recoger a los halcones pero hemos tirado otra piedra al espino y aunque no ha salido nada hemos oído que una urraca se quejaba dentro...
Y esa ha sido su perdición!!!
Hemos cogido todos bien de piedras y decidido hacia dónde sacar a la urraca. Cuando los halcones pasaban por encima (no demasiado altos) hemos tirado las piedras y ha salido la urraca muy baja.
La ha atacado primero el macho que ha conseguido tirarla al suelo y cuando volvía a herida la hembra la ha trabado muy bien.
Hemos sacado el señuelo para que bajara el macho que no había bajado y hemos cebado a los dos con media paloma recién sacrificada y media urraca.
Aunque no lo teníamos pensado mañana también volaremos para poder terciar el sábado, porque el domingo hemos quedado con Borja y vamos a ir a su finca a ver cazar a sus pájaros e intentarlo con los nuestros, que nos apetece mucho.


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